DESDE MI
SUPLICIO
Día y noche te
miro desde aquí en mi suplicio
Te amo desde
mi cruz aquí, en mi soledad
Te esperaré
todo el tiempo de aquí a la eternidad
Para ver si algún
día, tus ojos me quieren mirar.
Con mis
brazos siempre abiertos aquí estoy en el madero
Con el corazón
herido por lo mucho que te quiero
Te he amado
desde siempre, desde antes que nacieras
Y aunque no voltees
a verme por ti mi sangre vertiera.
En el
silencio te espero en este frío madero
Dime si no
basta esto, para demostrar que te quiero
Por ti derramé
mi sangre es el precio que pagué
Para salvarte
del fuego, para borrar tu pecado.
Si caes, yo
te levanto y te llevaré en mis hombros
Como la Oveja
perdida para volverla al rebaño,
Ven a mis
brazos abiertos que soy el pan de la vida,
Bebe de la
copa el vino que es mi sangre vertida.
Te amo desde
la cruz con mi corona de espinas,
Con sudor regué
la tierra cuando al calvario subía
Cuando cargaba
mi cruz, cuando azotaban mi cuerpo
Más por este
amor a ti, como un cordero seguí
Y así desde entonces,
día y noche te miro
Desde aquí, en
lo alto de la cruz.
08/01/19
Autor.
GELASIO
GASPAR
@derechos de
autor
No hay comentarios:
Publicar un comentario